Especial Diablo II: Acto I

¿Por qué lo seguí? No lo sé ¿Por qué en los sueños pasan las cosas que pasan? Yo lo que sé es que cuando me llamó tuve que seguirlo. Desde ese momento viajamos juntos al este, siempre hacia el este.

Así y con esta frase al final de una intro mítica daba comienzo la que para muchos supuso su primera incursión en el género del rol de acción y el Hack & Slash, de la mano de Blizzard Entertainment nos llegaba en el año 2000 una aventura grande, colosal, épica y con un buen puñado de horas de diversión, estrategia, rol y por supuesto demonios, harpías, momias y diversa farándula del inframundo, nos llegaba Diablo II.

Diablo II es la secuela directa de Diablo, juego lanzado en 1996, en la que un héroe desconocido derrotaba al señor del mal bajo una iglesia en la ciudad de Tristram, en Diablo II un viajero oscuro y errante viaja hacia el este sembrando la destrucción a su alrededor, todo apunta a que Diablo ha vuelto, pero el motivo de su viaje no está del todo claro, al menos desde un principio, por supuesto.

¿Cuál es nuestro papel en esto? Por supuesto impedir que Diablo lleve a cabo sus planes y que resuciten con todo su poder los tres demonios superiores conocidos como los Tres Males Fundamentales (Diablo, Mefisto y Baal), para ello perseguiremos a Diablo por todo el mundo de Santuario metidos en la piel de un nuevo guerrero anónimo, un campeón decidido a derrotar definitivamente a Diablo y terminar con su legado de muerte y destrucción.

El juego se desarrolla durante cuatro actos, cada uno de ellos ambientado en una localización distinta de Santuario, con sus respectivos NPCs, tiendas y misiones tanto obligatorias como opcionales, además de localizaciones extras donde conseguir suculentos tesoros, objetos, armas y armaduras. Por si esto fuera poco cuando completamos por primera vez el juego en el modo de dificultad estándar se desbloqueará el modo de dificultad Pesadilla, mucho más complicado, y completando el juego en Pesadilla desbloquearemos el modo de dificultad Infierno, todo un reto para cualquier jugador.

¿Que tal un visualizado a la intro antes de comenzar el primer acto de este especial?

Ahora sí, pasemos a descubrir las clases de héroes disponibles.

Las Clases

Para salvar Santuario de la senda de destrucción de Diablo y sus esbirros debíamos elegir un héroe de un total de cinco clases disponibles, cada una de ellas con tres árboles de habilidades, además de multitud de estrategias, fortalezas y debilidades.

Amazona, Nigromante, Bárbaro, Hechicera y Paladín.

Amazona: Las amazonas son mujeres guerreras especializadas en la lucha con arco y flechas, ballesta, lanza y jabalinas, son bastante fuertes pero lo que las define perfectamente es su gran precisión en los disparos, su alta velocidad tanto de desplazamiento como de ataque además de su capacidad de perforación en armaduras, una buena opción para el combate a distacia y cuerpo a cuerpo, no tan poderosa como el Paladín o el Bárbaro pero mucho más certera.
Nigromante:Los nigromantes son amantes y devotos de la magia que en cierto momento de la historia y debido a su emplazamiento físico no pudieron integrarse en los clanes de magia tradicionales, llegando a calumniarse contra ellos. Son devotos al culto de Rathma y gracias a sus enseñanzas y a años de investigación lograron comprender el equilibrio entre la vida y la muerte así como a dominar las artes necesarias para poder cruzar la línea fronteriza entre ambas dimensiones y traer de vuelta a los muertos o invocar poderes y entes del otro lado.

El nigromante es uno de los personajes más interesantes de Diablo II, su habilidad de poder reanimar a los muertos y controlarlos a voluntad hacen de este héroe un personaje prácticamente infranqueable e intocable en los niveles más altos de su desarrollo. Carece de gran fuerza pero no le es necesaria.
Bárbaro: Según cuentan las leyendas, en las Estepas del Norte habían una serie de tribus a las cuales se les encomendó proteger un poder sagrado y crucial para el equilibrio de la humanidad. Dichas tribus llevaban un estilo de vida nómada y se denominaban a sí mismos "Hijos de Bul-Kathos". Con el paso de los años estas tribus desarrollaron un extraordinario vínculo con la tierra y el aprovechamiento de las materias primas, además evitan el uso de maquinarias o magia.
Con el tiempo el resto de pueblos llamaron a estas tribus "Bárbaros" y cuenta la leyenda que la primera vez que se dejaron ver fue durante una batalla donde salieron por sorpresa y de la nada en defensa del reino cotiguo a sus tierras, desde entonces algunos mercaderes se atreven a comerciar con estos pueblos, aunque a nadie se les ha ocurrido jamás invadirlos. Desde la llegada de Diablo a Santuario se han visto constantemente muchos bárbaros fuera de las estepas, se rumorea que se preparan para la guerra.

El Bárbaro es la fuerza bruta hecha héroe, es el personaje con más fuerza, resistencia y desarrollo de vida tiene de todos los héroes, como contrapartida tiene que su energía es muy baja por lo que se agota rapidamente y su velocidad no es tampoco su punto fuerte, aunque claro si lo que quieres es disfrutar de Diablo II sin más mecánica que asestar golpes, este es tu personaje sin duda.
Hechicera: Procedentes del clan de magas de Zann Esu, uno de los clanes más antiguos que existen, cuenta la leyenda que hace siglos tuvieron una reunión y desde entonces nada más es ha sabido de ellas. Se desconoce el paradero de su guarida aunque mantenian pequeñas relaciones secretas de comercio con el mundo exterior y visitas periódicas cada cierto número de años a familias concretas de Santuario. Persiguen la dominación de la magia perfecta, ya que así creen que conseguirán el estado de pureza suprema, desarrollando su magia en secreto, estudiando y practicando durante generaciones hasta este mismo momento.

Desde la llegada de Diablo a Santuario muchas hechiceras de Zann Esu han sido vistas combatiendo a los secuaces de Diablo, según los rumores es posible que los oráculos principales de Zann Esu hayan decretado que el momento de la Aparición está al llegar y que la destrucción de los Males Fundamentales será el mayor reto al que deban enfrentarse.

Las Hechiceras son el personaje perfecto si queremos jugar a Diablo II sin prácticamente dar un golpe físico, podemos especializarnos en elementos concretoso tener un personaje equilibrado entre todos ellos, tú decides.
Paladín: La historia de los paladines se remonta a los tiempos en los que la iglesia de Zakarum tomó una posición dominante en los territorios del Este, tiempos en los que esa abundancia de poder hizo que se mandaran sacerdotes a todos los pueblos de Santuario para difundir la palabra de Akarat. Pero casi ninguno de esos sacerdotes regresó con vida debido a la dureza de los viajes, para ello la iglesia entrenó a unos guerreros sagrados, los paladines, para escoltar a dichos sacerdotes, el resultado fue que los mismos paladines resultaban más efectivos difundiendo la palabra de Akarat que los mismos sacerdotes, eso fue posible gracias a su notable valor, poder y destreza en combate así como del manejo de ciertas artes mágicas divinas.

Tiempo después la iglesia de Zakarum quiso iniciar una nueva campaña de captación de fieles a su religión, pero esta vez considerando a los no creyentes como paganos y dando órdenes a los paladines de asesinar a cualquier incrédulo de su religión o del que simplemente se creyese que podía realizar prácticas demoníacas, estar poseído o corrupto por el demonio, estos paladines recibieron el nombre de "Mano de Zakarum". Durante esta cruzada una rebelión tuvo lugar en las filas de los paladines, los cuales proclamaban que la nueva Orden de los Paladines protegería a los inocentes sin importar sus creencias, abandonaron la hermandad de Zackarum y decidieron combatir a los Tres Males Fundamentales (Diablo, Mefisto y Baal).

El Paladín es un personaje muy equilibrado, posee las mejores características tanto del bando mágico como del bando de la fuerza bruta, son grandes luchadores y expertos en la magia divina, sus poderosas auras acompañan al guerrero y sus seguidores protegiéndolos o fortaleciéndolos mientras que su enorme fuerza, defensa, resistencia y vida harán los estragos de cualquier ejército.

Árboles de Habilidades

Como hemos señalado en el apartado anterior, en Diablo II cada clase está perfectamente diferencia de las demás, pero es que incluso dentro de la misma clase es posible tener personajes completamente diferentes dependiendo de cómo queramos desarrollarlos, los elementos en que se especializarán y el estilo de combate que usarán y la estrategia que seguirán.

Algunos de los distintos árboles de habilidades

Así por ejemplo si optamos por hacernos un Paladín podemos desarrollarlo para que es especialice en magia divina de curación y auras de apoyo o bien que se especialice en el combate cuerpo a cuerpo, la defensa y la fuerza bruta, incluso puedes crear más variaciones aún ya que puedes entrenar a tu paladín para el manejo de armas segadoras de vida olvidando así la contundencia y la fuerza bruta y optando por una estrategia más entretenida, incluso podrás entrenar al Paladín para el dominio de algún poder elemental como el fuego, el frío o la electricidad.

Hechicera de Nivel 80 especializada en el elemento hielo

De igual forma ocurre con el resto de personajes, cada uno de ellos tiene suficientes variantes como para ser guerreros completamente diferentes dentro de su misma clase, podremos además entrenarlos para hacer frente en solitario a hordas de enemigos, o bien para apoyar a otros compañeros, para duelos de personajes en red o para cumplir el objetivo de terminar en solitario el juego en modo Infierno.

Ficha de Personaje

Por si contar con tres árboles de habilidades para personalizar de mil maneras a nuestro personaje, en Diablo II también disponemos de una ficha de personaje donde definiremos sus atributos en función de las necesidades del personaje en el desarrollo que tengamos pensado para él.

Ficha de personaje

En la ficha de personaje cada vez que subamos de nivel podremos administrar los puntos de atributo obtenidos, repartiéndolos en cuatro atributos, Fuerza, Destreza, Vitalidad y Energía. Cada uno de ellos tiene especial relación con el desarrollo del personaje. La Fuerza determinará el daño que realizamos y el nivel de armas y armaduras que podremos equiparnos, la Destreza indica el grado de acierto de nuestros golpes, la Vitalidad influye en nuestros puntos de vida y de resistencia en carrera, y por último la Energía influye en nuestros puntos de maná (el poder mágico).

Ficha de personaje del Bárbaro al comienzo del juego

Y con esto damos por terminado el Acto I de nuestro especial de Diablo II, en el siguiente nos encargaremos de ver un poco el tema de los objetos, armas y equipo posible, su infinidad de combinaciones posible y su componente estratégico.

Largos días y placenteras noches, y que veáis el doble.